Con este título Greenpeace lanza su última campaña de recogida de firmas para parar la inundación de #plásticos de empresas y supermercados y abordar el problema en su origen.
Parece que tenemos la sensación en nuestra vida diaria que el plástico no es un gran problema, simplemente desaparece de nuestras vidas una vez que lo usamos, no nos preocupamos de saber qué pasa con él después, si se recicla, si no se recicla, si se quema, si se entierra en un vertedero, si se lleva a otros países o si se acumula en los océanos hasta formar auténticas islas de plástico.
Los esfuerzos que podamos hacer por reducir nuestro propio consumo de plástico son necesarios, pero no siempre es posible no consumirlo y nos encontramos ante productos que necesitamos y que llevan envases a los que no podemos decir que no. Por ello se hace necesario además exigir un cambio de sistema de producción y distribución que implica a su vez un cambio en las leyes.
Hay que avanzar en todas direcciones para cambiar el rumbo. Para ello nos hacemos eco de la campaña de Greenpeace que puedes ver en este enlace.
Si quieres seguir profundizando en el tema en este enlace podrás encontrar “un millón de acciones contra los plásticos”, que puedes descargarte e impulsarte hacia la acción.
Y si quieres conocer más iniciativas como los Plastic attack en este post te explica qué son y cómo llevarlos a cabo.
También puedes conocer más e implicarte en el movimiento Break Free From Plastic. Un movimiento global, con diferentes delegaciones, que imagina un futuro libre de contaminación plástica.
